MEDIO AMBIENTE EN PELIGRO-CONSEJO A LAS ELITES.ABANDONAR LA TIERRA
MEDIO AMBIENTE EN PELIGRO
STEPHEN HAWKING PIDE A LAS
ÉLITES ABANDONAR LA TIERRA
Max Raúl Murillo Mendoza
El afamado físico
teórico inglés, Hawking, pidió hoy en la BBC a las
élites más poderosas del mundo abandonar la tierra. Sus
razones parecen justificables: cambio climático, crecimiento de
la población y otros peligros cósmicos. Pero lo que no
dice este genio de la física, es que su civilización es
la destructiva de la tierra. El modelo de desarrollo y económico
occidental, es destructivo, guerrerista, colonialista, imperialista,
agresivo, extractivista, racista y totalitario. Ese modelo que
privilegia al capitalismo más salvaje posible, donde sus
mercados son el agujero negro injusto del que las llaves la
tienen ellos; y a pesar de eso les ha llevado a guerras mundiales y
todo tipo de guerras en contra del sur del mundo, simplemente con la
intención de mantener a sus industrias de armas, que son las
más rentables junto al narcotráfico, para imponer sus
lógicas “democráticas” por donde se les
antoje.
Las ideologías del progreso y
desarrollo, inventos modernos de occidente, ya tienen desde hace mucho
tiempo sus resultados absolutamente concretos: destrucción del
hábitat humano y animal, contaminación brutal de mares,
ríos, montañas, selvas y aire. Esas ideologías han
destruido historias enteras sangrientamente, en los procesos coloniales
y luego imperiales por todo el planeta. Dicha civilización ha
dejado implantado poblaciones occidentales, que hasta hoy son el
escollo más importante de nuestros pueblos, pues nunca
entendieron nuestras realidades ni nuestras lógicas culturales y
económicas. Por donde uno mira esos resultados de la culta y
racional civilización occidental realmente observa
destrucción y muerte. Barnizados política e
ideológicamente por sus santos religiosos, sus
tecnologías cibernéticas ciertamente interesantes y sus
políticas de ayuda al desarrollo. Lavados de conciencia que han
funcionado muy bien hasta ahora, porque las poblaciones blancoides y
prooccidentales de nuestros países así lo copian e imitan
todo lo que venga de sus países nodrizas.
A todas luces ya todo está muy
claro; pero no es suficiente que esté claro, ahora se trata de
generar fuerzas contrarias y alternativas a esos monstruos y colosos de
occidente. Ellos destruyeron este planeta; sus sabios como Hawking
ahora les piden a sus élites abandonar este planeta, para ir a
destruir otros planetas porque ese modelo de eso se trata. Son los
virus culturales y económicos del mundo y la llamada historia.
Aunque su poder es inmenso todavía, por lo que asumen ese
totalitarismo apabullante. Y por ahora las alternativas aún se
dejan esperar en todo el mundo. Nosotros, desde la periferia, tenemos
que reconstruir y deconstruir nuestras lógicas aplastadas y
maginadas por la colonia, y continuadas en limpio por la
república. Inmensas tareas económicas,
ideológicas, Estatales y de construcción de los nuevos
tejidos sociales, llevarán mucho tiempo de trabajo constante y
de años.
Pues por todo el mundo se tiene que
reconstruir las maneras de compartir, de vivir en armonía con la
naturaleza, de vivir aprendiendo a tolerar a las culturas distintas, de
rescatar a los pueblos occidentales engañados por sus
élites guerreristas y sanguinarias, de construir teórica
y prácticamente otros tipos de Estado y no las imitaciones
burdas occidentales que son hoy. Tareas gigantescas, nada sencillas y
que probamente nos lleven generaciones para salvar nuestros
hábitats, nuestras mentalidades, nuestros tejidos sociales y
ojalá así dejar un planeta más sano para las
nuevas generaciones. Un planeta menos guerrerista y occidental, un
planeta por fin más humano. Que las élites destructivas
se vayan, pues sabemos que destruirán todo lo que encuentren en
el universo: esa es la lección que tenemos de la historia
moderna.
Sí, reconstruir, deconstruir,
armar otra vez tantas herencias milenarias que han funcionado
sosteniblemente: Estados, lógicas económicas, tejidos
sociales y culturales comunitarios, ciencias más amigables con
la naturaleza, es decir con nuestra casa y la única,
recomposiciones del espíritu humano para entender que no tenemos
más alternativas que compartir este mundo de manera espiritual,
humana, solidaria. Que el vivir y morar en este planeta sea realmente
un paso y paseo sin sufrimiento, sin explotaciones sanguinarias y
guerristas. Que la vida en la tierra no sea el valle de lágrimas
que es, sino algo cercano a los cuentos de los paraísos de
tantas culturas.
El cinismo de las élites
occidentales, y ahora de otras también, es igual a su historia
en estos siglos. Después de destruir la tierra, se irán y
abandonarán en consecuencia a miles de millones de
habitantes, afectados globalmente con el modelo de desarrollo y
progreso contaminante, segregador social y cultural. El tiempo ya
está en contra de la inmensa mayoría de la humanidad,
porque vemos con nitidez la desaparición de especies de
animales, se nieves de las montañas, de peces en los
ríos, de selvas, de bosques y planicies. Se requiere tomar
medidas radicales y prácticas en contra del modelo; eso es
vencer y saltar por fin a las ideologías destructivas de lo que
se llama modernidad: desarrollo y progreso. Monstruos
ideológicos que se han impuesto a sangre y fuego.